Tras la lectura propuesta, del artículo “La Reputación online” y entendido como reputación, el conocimiento, seguimiento y control, de toda la información que se publica en la red y que afecta a una empresa, institución o persona, me han surgido una avalancha de dudas, al respecto de la privacidad y sobre todo de la veracidad de todos los comentarios y opiniones que se vuelcan en la red y que se hacen de forma publica por todo el mundo.
Puede una persona o institución ya sea pública o privada, “controlar” de algún modo todo lo que se opina y publica en la red sobre ella, sus servicios o productos e incluso hablamos de información pública.
Puede resultar más fácil controlar los comentarios y opiniones a una institución, además esta siempre más protegida con políticas de privacidad internas que restringen el acceso a la información propia de la institución; pero a nivel personal esto resulta más complicado, lo que nos puede llevar a plantear dudas razonables, sobre si realmente la información que está pública en la red, puede llegar a rozar los límites aceptables de la privacidad o pueden ir en contra de la reputación de una persona o entidad.
Creo que todos usuarios ya sean instituciones o personas, pensamos que estamos protegidos, ante la publicación de nuestro datos personales, pero no podemos evitar que otros atenten contra nosotros haciendo publicas ciertas informaciones que se pueden considerarse de índole personal, entonces nuestras preguntas serían:
¿Dónde están los límites entre lo público y lo privado en la red?
¿Alguien media para que estos datos personales no se den a conocer?
¿En Internet todo vale?
¿puedes libremente publicar y opinar sobre todo y sobre todos?.
Gran dilema, por lo menos para mi como usuario de la red y integrante activo de algunas herramientas de la web social, como blog, Wiki, Twitter, Facebook, Skipe, etc., yo no estoy realmente segura de que nuestra información, me refiero a datos personales y privados estén realmente protegidos, estamos entonces desprotegidos ante cualquier atentado que pueda vulnerar nuestros derechos.
Si partimos de la idea de que estamos en una “sociedad democrática y de libre expresión”, nunca se puede evitar que se publiquen comentarios, ya sean positivos o negativos, siempre que algún usuario quiera publicarlos, aunque es cierto que existen mecanismos para evitar un uso fraudulento de un buscador.
¿están realmente protegidos los internautas de ataques a su persona y a la privacidad de sus datos personales?
Para descubrirlo he realizado un seguimiento en la red, durante una semana tanto de una Institución como de un profesional del mundo de la información en la red y así observar y poder valorar de primera mano que noticias, publicaciones hay sobre ellos, que opiniones, comentarios, e información está disponible en la red sobre ambos:
- Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, como institución.
- Nieves González Fernández Villavicencio, como persona.
Para ello he utilizado diferentes herramientas disponibles en la propia red, como han sido BlogSearch, Wink, Google Alerts, Twitter, Facebook y búsquedas en los buscadores directamente para ver que posiciones ocupan y la información que está accesible de ellos.
Después de haber consultado ambos, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes y la Bibliotecaria Nieves González, en BlogSearch, hemos verificado de ambos cuentan con blogs propio con enlace a su página web, y a Facebook, Twitter.
- http://blog.cervantesvirtual.com/
Como se trata de una Institución como de un Profesional de gran prestigio y reconocimiento en la sociedad de la información, con actividad en el mundo digital, son muchas las páginas y blogs, en la red que hablan ellos, les citan, a sus artículos, hacen comentarios, sin ir más lejos en la asignatura, somos varios compañeros los que estamos siguiendo el blog de Nieves González, entre los que me incluyo, porque me parece que hace una aportaciones muy elaboradas e interesantes sobre las nuevas tecnologías de la web social y sobre los profesionales de la información o como titula su propio blog Bibliotecarios 2.0.
Indicar en su propio blog ella nos muestra todos sus datos profesionales y vías de acceso a la información que publica y comentarios sobre ella en la web, y la publican en la red que denomina: Acerca de mi, encontramos la siguiente información:
“Hola, soy Nieves González Fernández Villavicencio, bibliotecaria de la Universidad de Sevilla (nievesglez@us.es) y profesora de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla (ngonfer@upo.es)
En este enlace tenéis mi curriculum completo (hasta marzo de 2011)
Me podéis contactar para lo que haga falta en nievesglez@gmail.com
Podéis ver lo más destacado de mi perfil en google, los favoritos que guardo en del.icio.us, y en Diigo (por aquello de la seguridad), mis contactos profesionales en Linkedin y mi red en Facebook. Mis comentarios en Twitter, mis presentaciones en Slideshare, o en Prezi, mis videos en YouTube y mis fotos en Flickr. Lo que se dice de mi en BlogSearch y lo que se sabe de mi en Google.
Otros sitios que mantengo:
- Twitter de la Sección de Apoyo a docencia de la BUS Alfinbus
- Twitter de la asignatura TIC para Humanidades (UPO) TicHuma
- Picassa nievesglez
- FriendFeed nievesglez
- FourSquare
Es miembro de estos grupos en las redes sociales: Information Literacy in Second Life: Nievesglez Puedes encontrar tambien este blog en Facebook
También aparece información sobre ella en:
Toda la información a la que podemos acceder es información de tipo profesional ya sean comentarios o aportaciones en las que de algún modo aparece Nieves González.
También he creado una alerta en Google para cada uno de ellos, todos los días he recibido un mensaje con varias noticias publicadas en la red de ambos, tengo que decir que más sobre la Bibliotecaria Nieves González que de la Biblioteca Virtual Miguel Cervantes, se nota que los dos están presentes y son activos en los diferentes canales de comunicación de las redes sociales, lo que hace que sean participativos y que tanto ellos compartan información, como el resto de usuarios de la red social, opinen sobre sus comentarios y aportaciones.
En cuanto a la participación en las redes sociales, ambos participan en Facebook y Twitter de manera muy activa, sobre todo Nieves González que cuenta en Twitter con 2.193 Tweet, y le siguen en Twitter 1.184 seguidores, publica una media de unos 5 tweets al día todos relacionados con profesionales de la información y la nueva web social; y la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, cuenta con 420 tweets y 1.007 seguidores, entre los que yo me incluyo, porque son muy influyentes y activos en cuanto a estar al día de todo lo que acontece.
También he realizado una búsqueda en: http://wink.com/, de cada uno de ellos, de Nieves González si he encontrado información y enlaces a su facebook, pero sin embargo en este caso de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes no he encontrado resultados.
A modo de conclusión indicar que tanto sobre la institución analizada como de la persona, toda la información a la que he accedido es del tipo profesional, y no personal, salvo la que la propia institución y la propia bibliotecaria dan acceso desde sus páginas web.
Si he accedido a información nueva de cada uno de ellos, pero en ningún momento esta información que está pública en la web roza los límites aceptables de privacidad y en ningún momento van en contra de la reputación ni de la bibliotecaria, ni de la biblioteca que hemos monitorizado en la web haciendo uso de las múltiples herramientas disponibles.
Además en el caso tanto de la bibliotecaria Nieves González y de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes no hemos encontrado comentarios negativos tal y como se explicaba en la lectura de la Reputación online.
Pero a pesar de que en estos casos analizados en particular, no se hayan expuesto sus datos personales en la red, sigo opinando que los Usuario en la red estamos Desprotegidos en cuanto a temas de privacidad.
Mª José, creo que las dudas que planteas en el título del post y al comienzo del mismo son muy lícitas, y en gran medida creo que llevas razón, pero a la vez pienso en la idea que, en algún momento, nos han hecho llegar Eva y Tony: ¿por qué tenemos tanto miedo a unir nuestra faceta profesional con la personal? ¿Por qué creamos varias cuentas en un mismo servicio, y por qué nos da miedo que la información que "publicamos" sea pública? Si publicamos información, como el mismo verbo indica, es para hacerla pública...
ResponderEliminarYo también me incluyo en ese grupo que es tan celoso de su intimidad, pero empiezo a darme cuenta de que, quizás, le estemos dando un mal uso a las redes sociales. Si nos importa tanto que se sepa quiénes somos, es posible que no debamos tener más que un perfil profesional, en el que no apuntemos ningún detalle privado que no queremos que se conozca. Aún tenemos el correo postal, o el móvil, en caso de querer mantener ciertas cosas en privado, fuera de las redes sociales.
En conclusión, creo que, si los usuarios estamos desprotegidos, es porque nosotros mismos permitimos que sea así, asumiendo unas condiciones de privacidad que no existen (¡si ni siquiera nos leemos la política de las páginas a las que nos adherimos!) . Así que, como usuarios, debemos asumir que la red es pública, y que todo es susceptible de ser encontrado.
Yo añadiría que no tengo miedo a unir lo profesional con lo privado, sencillamente no me interesa airear mi vida privada y por lo tanto, no lo mezclo.
ResponderEliminar¿Porqué algunas celebrities son pasto de los paparazzi y otras no? Pues sencillamente porque las respetadas nunca han aceptado las reglas del juego y se han mantenido al margen...
Si sé que a Leiva le gusta mover el bigote o que Tramullas es aficionado a la ciencia ficción es porque ellos han querido que así sea. Luego los límites los pones tu mismo.
Un saludo.
Muy validas las preguntas planteadas por Mª José, y la respuesta que puedo encontrar a ello es que si no quiero ver vulnerada mi privacidad y malograda mi reputación tenemos la responsabilidad de gestionar nuestra identidad digital, definiendo como nos presentamos y que datos hacemos accesibles. Pues a estas alturas es casi imposible ser anónimos, pues aunque no queramos tenemos una presencia digital, hasta gratuita.
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